Resumen
A pesar de los esfuerzos para reducir la edad de diagnóstico del trastorno del espectro autista (TEA) y mitigar las disparidades en la identificación de niños con TEA de diversos orígenes, solo hemos comenzado recientemente a avanzar en este sentido. Los pediatras se enfrentan a una tarea formidable: reconocer el TEA, una condición con una prevalencia relativamente baja y signos que pueden no ser evidentes durante un breve encuentro clínico. Con relación a esta cuestión, investigaciones recientes sugieren que el Cuestionario Modificado para el Autismo en Niños Pequeños (M-CHAT) es menos preciso en la detección del TEA en la práctica clínica de lo que se pensaba anteriormente. Este trabajo lleva a cabo un estudio retrospectivo utilizando datos de registros de salud electrónicos para evaluar las prácticas de detección y los resultados diagnósticos del TEA en niños de 16 a 30 meses vistos entre 2013 y 2016 en un gran sistema de salud en Utah. Los resultados sugieren la necesidad de reconsiderar la práctica clínica actual.