Resumen
Cada vez son más las niñas, niños y jóvenes a las que se les diagnostica autismo. La estimación más reciente del Gobierno es que casi el 2% del alumnado de Inglaterra tienen autismo, una cifra que ha aumentado en los últimos años a medida que el autismo ha aumentado. Las personas con autismo experimentan el mundo de forma manera diferente, lo que puede repercutir en la en la comunicación e interacción social, en los intereses pueden caracterizarse por comportamientos repetitivos. También pueden tener formas de aprender, moverse o prestar atención.
Hay que transformar los sistemas para estos niños y niñas que necesitan apoyo de los servicios sanitarios y reformar urgentemente la forma en que se realizan las evaluaciones y se comparte la información. Además de mejorar las oportunidades en la vida, abordar esta crisis de evaluación del autismo podría tener un efecto beneficioso en los sistemas más amplios de educación, sanidad y justicia penal, y reducir algunas de las enormes presiones financieras actuales sobre estos servicios.